La transformación curricular da respuestas a tres grandes preguntas:
¿Qué aprenden los estudiantes, para qué y cómo?
Cambian los contenidos y las prácticas de enseñanza y de evaluación. Se buscan aprendizajes de importancia, cercanos a la realidad de los estudiantes y que estén a la altura de las exigencias de la sociedad actual.
Se cambia la forma tradicional de enseñar que partía de la repetición y memorización de contenidos, por una educación basada en competencias, que motiva e involucra al estudiante en su aprendizaje a través de propuestas educativas activas y de aplicación práctica.
La construcción del nuevo Marco Curricular partió del diálogo con los diferentes actores del sistema educativo (docentes, estudiantes y familias), pero también con otros sectores de la sociedad (sindicatos, empresarios, educadores y partidos políticos).
¿Cuáles son los principales documentos?
El Marco Curricular Nacional es el documento de mayor jerarquía, contiene los principios que rigen al sistema educativo, los aprendizajes que se espera que los estudiantes desarrollen durante su trayecto en clave de competencias generales, y el perfil de egreso de los estudiantes al culminar su educación obligatoria.
A este documento le sigue el de las Progresiones de Aprendizaje y los Perfiles de Tramo.
Estos documentos fueron insumos para la elaboración del Plan de Educación Básica Integrada, el Reglamento de Evaluación del Estudiante, el Plan para la Educación Media Superior 2023 y el Reglamento de Evaluación del Estudiante del Plan para la Educación Media Superior 2023.
Por último, los Programas de Educación Básica Integrada y de Educación Media Superior (1er. grado, 2do. y 3ero.) son los documentos curriculares de mayor nivel de concreción en el territorio, en los que se apoya el docente para definir y diseñar sus propuestas de enseñanza y de aprendizaje.